-Nombre de Personaje: Serader Raxus
-Apodo: El Verdugo
-Edad: 38 años
-Sexo: Hombre
-Raza: Dug
-Facción: Orden Sith
-Rango: Darth (aprovechando la actual promoción del foro: link
-Planeta de Origen: Malastare
-Pertenencias: -Datapad: guarda informacion, segun como lo hagamos los creditos tambien. Es como un block de notas electronico. Puede guardar imagenes tambien junto con todo tipo de informacion.
-ComLink: Instrumento de comunicacion basico, casi todos tienen uno. Tiene sonido y video. Tienen un rango reducido, aunque si se adhiere al Comlink de una nave se aumenta muchisimo.
1-Tres sables láser: dos rojos y uno azul.
2-Armadura de metal, fuerte y ligera
3-Gancho de cuerda de acero: instalado en su cinturón, el gancho se dispara al activar el mecanismo y se engancha a casi cualquier superficie, aguantando varios kilos debido al cable de acero. Útil para trepar o descender por zonas empinadas.
4-En su cinturón lleva algunas medicinas para tratar heridas menores.
5- (por ahora nada)
-Habilidades: (8+2 raciales)
-Dureza: relacionada con la Resistencia. Tienes más resistencia que los demás, aguantando más golpes y heridas sin perder el conocimiento. Llevando tu cuerpo al límite.
- Velocidad de Fuerza: Permite incrementar la velocidad de los movimientos y al correr.
- Visión de la Fuerza: “Ver con la Fuerza” sirve para tener una visión clara en entornos hostiles, anula la invisibilidad, ya sea orgánica –a través de la Fuerza– o la inorgánica (a través de artilugios tecnológicos).
- Salto de la Fuerza: Salto propulsado por la Fuerza.
- Onda de fuerza: Versión modificada del Empuje de la Fuerza. Sirve para crear un campo de empuje que afecta a todo ser viviente u objeto cercano; es un ataque telequinético./
-Atracción con la Fuerza: Contrario a empujón, sirve para atraer gracias a la Fuerza.
- Drenado de la Fuerza: Usa la energía vital de otras personas para incrementar las propias.
-Tormenta de la Fuerza: Versión mejorada y avanzada de Rayos de la Fuerza, sólo que éste ataque energético es de área.
-(Destreza Dug): Pueden usar cada extremidad como pata o mano, pudiendo pararse en una sola y manipular cosas con las otras 3 y se mueven muy bien en planetas con menos gravedad que el suyo.
-(Raza Guerrera): debido a una larga tradición bélica, los individuos de esta raza tienen un don innato para el manejo de las armas cuerpo a cuerpo.
-
Atributos: 70 +30 puntos por ser usuario de la Fuerza en 3er rango
Fuerza: 10
Agilidad: 25 (+2)
Destreza: 25 (+2)
Resistencia: 10
La Fuerza (exclusiva Jedi/Sith): 15 (+7 )
Dominio de la Fuerza (exclusiva Jedi/Sith): 15 (+7 )
-Descripción física: - Cabello: ---
- Ojos: almendrados, ambarinos, hundidos en las cuencas de sus ojos.
- Contextura: atlética y de formas marcadas, alto para su raza, de brazos y piernas fuertes.
- Altura: 1,16 cm
- Ropa: armadura ligera, hombreras protectoras de color rojo, pantalón con protecciones, guantes en las manos, capucha negra, cinturón para portar objetos.
- Otros: en su cuerpo son visibles varias cicatrices, desde las que sufrió durante su infancia cuando era esclavo hasta las más recientes, fruto de sus múltiples batallas. Está orgulloso de ambas, ya que le sirven para recordar quien fue y lo que es ahora.
- Imagen:
-Descripción Psicológica: Ambicioso, enigmático, letal… hay muchas palabras que definen a Serader, y ninguna de ellas implica algo bueno. Su mente fría y calculadora es capaz de pensar rápido para ayudarle a salir de cualquier situación, y si su plan falla siempre le queda la improvisación, la cual suele acabar con varios cadáveres y miembros amputados de por medio. Normalmente aparenta una inquietante tranquilidad, pero tiene muy mal carácter y no suele soportar muchas provocaciones antes de saltar sobre el iluso que se atreva a acabar con su paciencia.
No se detendrá ante nada hasta conseguir su objetivo: eliminar a todos los Jedi que plagan la Galaxia y terminar de una vez por todas con la República que discriminó a su especie. Para ello no tiene reparos en matar tanto a niños como a mujeres y gente indefensa, tanto si se meten en su camino como si no, y no son pocas las veces que los ha usado como rehenes para atraer la atención de algún Jedi.
En su vocabulario no entra la palabra compasión y tampoco es que tenga un gran sentido del honor en combate, sin remordimiento alguno al asestar puñaladas por la espalda. Disfruta humillando y torturando a sus víctimas hasta que mueren de agotamiento, pero si ve que lleva las de perder huirá en el acto. En este sentido, su filosofía puede ser “huye hoy para luchar otro día”, no obstante no soporta que se le tache de cobarde.
Disfruta de la música y arte, así que no es extraño escucharle tararear alguna canción. De vez en cuando, incluso recitando alguna estrofa o poema.
Es solitario, pero disfruta de la compañía de cualquiera que le proporcione una buena conversación, siendo un excelente orador. Esta habilidad puede usarla con otros fines, por ejemplo, hacer daño sin necesidad de mancharse las manos, atacando con afiladas palabras directas al corazón de las personas. En sus viajes, de vez en cuando, se ha visto obligado a requerir a los servicios de caza-recompensas y mercenarios pero estos casos son extremadamente raros y solo recurre a estos grupos cuando es estrictamente necesario. Cuando se percató de que un aprendiz sería bastante útil para sus propósitos, se dirigió inmediatamente a una búsqueda para encontrar a alguien digno de recibir sus enseñanzas
-Miedos: -A experimentar sentimientos distintos al odio.
-A perder su poder
Aspiraciones: -Encontrar un aprendiz.
-Vengarse de los Jedi y de la República.
-Voz del personaje: Brad Garrett link
Historia: Nada más nacer, Serader ya estaba destinado a ser un esclavo, como tantos otros Dugs de Malastare. Sirvió durante doce años a un acaudalado Gran que abusaba de sus sirvientes como le parecía, privándoles de unas condiciones dignas, dejándolos morir de hambre… todo esto avivó el odio que sentía hacia los Gran, hacia la República por hacer caso omiso de su desesperada situación. Una noche, un extraño llegó a la mansión del Gran, alegando haberse establecido hacía poco en la capital y diciendo querer comprar uno de sus sirvientes. A él.
El Gran aceptó el pago y Serader se marchó con el misterioso individuo. Éste le explicó que no era ningún rico ciudadano recién establecido, sino un Maestro Jedi que se había detenido en el planeta a reparar su nave. El Jedi, llamado Oblos Thurin, le contó que había percibido una gran presencia de la Fuerza en él y había decidido comprarle para adoptarle como aprendiz y enseñarle los caminos de la Orden Jedi.
Serader no se hizo de rogar. Pensaba que, si conseguía poder suficiente, podría vengarse del mal que los Gran le habían causado a él y a otros y hacer entender a la República que los Dug merecían ser tenidos en cuenta. El Maestro, al percibir esto, intentó hacerle entender que la venganza no era el estilo de los Jedi. Serader estaba indignado. ¿De qué servía tener poder si no podías usarlo? ¿Qué iba a hacer? ¿Perdonar? ¿Olvidar? No, ese no era su estilo. Era demasiado orgulloso para ello.
Hizo creer a su maestro que había superado esos sentimientos para aprovechar así sus enseñanzas, pero con el paso del tiempo, Oblos se percató de esto y le repudió como aprendiz. Serader no podía contener su furia, pero era sensato: con sus conocimientos actuales no podría derrotar al Jedi. Necesitaba otro Maestro, uno que no tuviera recelo en enseñarle a usar su odio para aumentar su poder. Fue entonces cuando huyó de la Orden y atrajo la atención de un Sith llamado Darth Duma, quien le tomó como su nuevo aprendiz y se ofreció a mostrarle el camino del lado Oscuro.
Con el paso del tiempo, Serader se hizo cada vez más fuerte, lleno de ambición, odio, orgullo y deseos de venganza. Llegó un momento en el que superó incluso a su nuevo Maestro, matándole tras derrotarle en lo que debía ser un duelo de entrenamiento. Ahora era un Darth Sith, pero no quería ningún nuevo nombre. Quería que la gente recordase quién era, quería tener siempre presente de dónde procedía, cómo había sido su vida hasta llegar hasta allí.
Se apropió del sable láser del Sith muerto y se marchó de nuevo en busca de su antiguo maestro, Oblos. Éste dio con él primero, y no podía soportar ver a su antiguo alumno convertido en lo que era ahora. No obstante, Serader era más poderoso esta vez, y tras un encarnizado combate que llevó al límite a ambos rivales, el Dug se hizo con la victoria, hundiendo el sable láser del propio Oblos en su pecho. Su cuerpo había quedado marcado por innumerables cicatrices, pero éstas no eran más que una muestra de supremacía, de que por mucho que lo intentasen, nadie sería capaz de vencerle. Se apropió también del sable láser de Oblos, de color azul eléctrico, por el mismo motivo: demostrar su superioridad.
Su siguiente paso fue volver a Malastare. No había olvidado a aquel Gran, y por lo que parecía, él tampoco le había olvidado a él. Sin embargo, era demasiado tarde para correr, y el Gran murió entre terribles torturas por parte del Dug. Ese mismo día, para su sorpresa, una gran flota aterrizó en el planeta, desembarcando un gran ejército que comenzó a eliminar uno a uno a todos los Gran. El momento del alzamiento del Nuevo Imperio había llegado, y si ellos estaban contra la República, contra los Gran y contra los Jedi, entonces eran sus aliados. Participó en el famoso Genocidio Gran, en el cual se ganó el macabro apodo de El Verdugo, ya que asesinó a tantos Gran de un modo tan horrible que sus acciones quedaron marcadas incluso en la memoria de los soldados del Nuevo Imperio.
Poco más tarde, el Lord Oscuro Argos llamaba a los Sith para luchas junto al Nuevo Imperio. Las cosas no podían ir mejor para Serader, quien continuaría con su venganza, vagando por la Galaxia hasta que no quedasen más que restos carbonizados de la Rpública.y el último Jedi haya sucumbido ante él.
Tema: Serader Raxus, el Verdugo 
Mar Dic 14, 2010 4:14 pm
